El Magazine del Viajero
7 lugares en todo el mundo que generan un extraño sentimiento de admiración y extrañeza.
Muy a menudo las estampas de naturaleza más reproducidas son aquellas en las que se muestra más abrumadora, donde el hombre se siente frente a ella más insignificante. En este artículo vamos a esos otros parajes en los que la Naturaleza no juega a sobrepasarnos sino a asombrarnos, a producirnos una mezcla de fascinación y extrañeza imitando los contenidos de nuestra imaginación.
Goblins Valley (EE.UU.)
Comenzamos con este extraño paraje que encontrarás en el estado norteamericano de Utah, un estado, por lo demás, muy rico en este tipo de paisajes áridos y desconcertantes. Pero el Goblins Valley es diferente al resto, especialmente por los hoodoos, o lo que es lo mismo, sus caracteríticas formaciones rocosas con forma de hongo gigante. De hecho, su descubridor, Arthur Chaffin, lo bautizó en los años 20 del pasado siglo con el nombre de Mushroom Valley (Valle de los Champiñones). La denominación misteriosa y evocadora de hoy se puso de moda en los años 60 tras la adquisición de estos terrenos por parte del estado de Utah. Si te apetece visitarlo, recuerda que la entrada para explorarlo cuesta 15 $.
Lago rosado de Hillier (Australia)
Situado en el archipiélago de La Recherche, en Australia, este lago de 600 metros parece hecho de batido de fresa. Sin embargo, nada más opuesto al dulce: aunque todavía no se sabe con certeza, las diferentes teorías sobre el peculiar tono de sus aguas hacen referencia a su saturación salina. Pese a todo, este lago no contiene nada que pueda provocar efectos adversos en los humanos, por lo que es totalmente visitable.
Ciudad Encantada (España)
En el parque natural de la Serranía de Cuenca se encuentra este curioso lugar. Denominado Ciudad Encantada por razones que saltan a la vista, está compuesta por formaciones calcáreas con curiosos nombres tales como El Perro, El Cocodrilo o El Convento. Sin embargo, probablemente, la más famosa de todas ellas sea la conocida como El Torno Alto, una formación de nada más y nada menos que 20 metros de altura que parece desafiar la gravedad. Su base estrecha y su ensanchadísima cabeza le otorga ese aire tan interesante, de fortaleza y de fragilidad al mismo tiempo. Si quieres verla, deberás pagar una entrada cuyo precio ronda los 5 €.
Montañas de Vinicunca (Perú)
Un lugar muy evocador y tan extraño como hermoso. Ubicado en la región de Cusco, es probablemente uno de los lugares más fotografiados del país. Sus hasta 7 colores responden a la diferente composición mineralógica que otorgan a este lugar ese tono tan característico y único. Eso sí, si vas a visitarlo para contemplar sus colores en su máxima expresión, recuerda que son más llamativos cuanto más seco es el clima, por lo que es aconsejable visitarla en el mes de agosto.
Spotted Lake (Canadá)
Se trata de uno de los lagos más fascinantes del mundo, conocido como “Lago Manchado” debido a sus 365 pozas. Ubicado en el valle de Okanagan, una región que hoy en día es una de las pocas reservas indias en Canadá que van quedando. Desde antiguo los nativos usaban las aguas de este lago con fines curativos; probablemente fuera por su concentración de diversos minerales, que son también la causa de que sus aguas cambien de color dependiendo de la temporada del año.
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Las Cuevas del Drach (España)
En Porto Cristo, en el mismo término municipal de Manacor (Mallorca), se encuentran las Cuevas del Drach. Una de las cuevas más impresionantes de España en donde la naturaleza ha puesto lo mejor de su creatividad. Seguramente lo que más conozcas, en parte debido a la película El Verdugo de Berlanga, sea su emblemático Lago Martel. Pero lo mejor es entretener la mirada en cualquier recoveco: descubrirás formas imprevistas y alucinadas. Destaca por su realismo y hermosura, las formaciones que asemejan ser un bosque de extraños árboles. Además, están abiertas todo el año, por lo que puedes visitarlas en cualquier momento. ¡No olvides que en temporada baja hay vuelos baratos a Mallorca desde 35 € con aerolíneas como Ryanair!
Las rocas esféricas de Koekohe (Nueva Zelanda)
También conocida como la playa de los Huevos del Dragón, dada la ambigua presencia de sus características rocas esféricas puede ser lo que tu quieras, incluso una cancha de fútbol de dinosaurios. Lo cierto es que las rocas esféricas de Koekohe, concentraciones cálcicas posteriormente modeladas por la acción del viento y el agua. Hay algunas realmente grandes que pueden llegar a los 2 metros de diámetro y a varias toneladas de peso. Verlas es hermoso pero también perturbador: su forma esférica, poco habitual en la naturaleza, evoca en el visitante un sentimiento de desasosiego.
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