El frío comienza a llamar a las puertas de las casas: adiós a pasar las horas junto al mar, llega el momento de mirar hacia delante, a la siguiente estación. El cambio en el aire y la llegada de las lluvia incita a comenzar a vivir de puertas hacia dentro, sobre todo en el norte peninsular. Es el momento de descubrir juntos cinco mercados que marcan la llegada de la siguiente parada de la temporada.
¿Qué hacer ahora con el tiempo libre? Pronto llega el momento de descubrir los mercados navideños más destacados del continente, una tradición compartida por mucha gente en diferentes países.
Papá, ¿me compras un algodón de azúcar?
Reencontrarse con la gastronomía tradicional, en estos mercados se venden productos locales y típicos de todo tipo mientras las horas de luz se reducen y el aire frío nos acaricia la piel. Estos mercados los encontramos en infinidad de naciones, tanto en grandes núcleos como en pequeñas poblaciones. Es el momento de que adultos y niños compartan su tiempo contribuyendo al ambiente festivo de la Navidad al tiempo que disfrutan de bebidas calientes y reparten sonrisas.
Cerca de un mes y medio antes de la llegada de este período es cuando nos hacemos la siguiente pregunta: ¿Cuáles son los mercados navideños más atractivos de Europa?
Aquí ofrecemos nuestro particular Top 5 en el que encontramos un compendio de plazas en las que ir introduciéndonos a esos días.
Stuttgart
Aquí encontramos el mercado para megalómanos, casi 300 puestos que harán las delicias de los visitantes, sin olvidar el encanto que supone el hecho de que sea el más antiguo. Se encuentra en el espacio que va desde el castillo a la iglesia, en pleno casco antiguo, con un telón de fondo repleto de luces brillantes y colores. El aroma de los deliciosos manjares que nos vamos encontrando inunda las avenidas, siendo la gula quien guiará los pasos de adultos y niños.
-Nota: no podemos dejar de probar las tazas de vino caliente, Glühwein. Un sorbo con el que entrar en calor al abrigo de los seres queridos, contemplando el árbol de navidad en la plaza principal.
Viena
¿Estás pensando en una Navidad para dos? Viena es tu destino: las calles principales del centro histórico se tiñen de una atmósfera romántica única. Uno de los aspectos más llamativos de este mercado es el cuidado meticuloso con el que nos encontramos los puestos, los cuales se muestran como un orgullo en uno de los mejores eventos navideños de Europa. No podemos olvidar que los mercados están esparcidos por toda la ciudad, mereciendo la pena todos y cada uno de ellos. ¿Dónde encontramos el mayor número de artesanía local? En Spittelberg, una visita obligada.
Budapest
La capital húngara se viste con sus mejores galas blancas cuando llega la Navidad: un manto de nieve envuelve la ciudad conformando un telón de fondo lleno de belleza y poesía. En la Plaza de Vörösmarty encontramos decenas de vendedores ambulantes, músicos y, por supuesto, cientos de personas, locales y extranjeros. Es el momento de disfrutar de los productos locales como el Kürtőskalács, un dulce simple y delicioso, o el Langos, a medio camino entre los churros y las pizzas. Sin olvidar degustar un Tokaj, uno de los vinos más famosos de Hungría.
-Recomendación: pasear junto al Danubio con la ciudad nevada es un espectáculo único, impresionante.
Francfort
Volvemos a Alemania: en este caso Frankfurt merece una mención especial. Sus puestos son un auténtico deleite para los visitantes de toda Europa. La salida, por la mañana, nos ofrece una paseo por las calles principales, en ellas descubriremos infinidad de posibilidades para disfrutar de los sabores locales. ¿Quién no sueña con almorzar alguna vez a base de salchichas (las famosas wurst) y papas fritas? Cuidado con las grasas, pero es el momento de disfrutar.
-Nota: pasear por las calles del centro con la caída del sol es toda una experiencia. Römerberg se tiñe de cálidos colores, huele a Navidad.
Nápoles
En la capital de la Campania nos encontramos uno de los mercados más espectaculares. ¿El tema principal? El arte de los pastores locales con su especial toque navideño. El lugar perfecto los entramos en Via San Gregorio Armeno y Via San Biagio dei Libreiros, donde podremos comprar alguna de las preciosas estatuas elaboradas por los maestros artesanos que pueblan estas avenidas. Aquí se fusiona lo profano con lo sagrado: las representaciones pueden ser desde de políticos a actores o futbolistas.
-Recomendaciones: no te pierdas el Struffoli y el Rococó, dos pasteles navideños típicos de Nápoles. Quizás el mejor acompañante sea un auténtico espresso.
¿Conoces algún otro mercado digno de mención? ¡Comparte tus experiencias con la comunidad de liligo.com!