Acércate a la ciudad de la histórica región francesa de Borgoña, famosa en todo el mundo por sus vinos.
Dijon no es una ciudad muy turística, pero está repleta de encantos que te sorprenderán. Más allá de la famosa mostaza que lleva su nombre, la capital de la región de Borgoña-Franco Condado tiene muchas bazas para seducirte. Su singular centro urbano, su historia y su gastronomía, los vinos… ¡hay tanto que ver y saborear! Al igual que Reims, Dijon goza del apodo de “ciudad de los cien campanarios” gracias a sus numerosos edificios religiosos. Como puedes ver, no tendrás tiempo para hay lugar para aburrirte. ¡Descúbrelo todo en nuestra guía!
1. La ruta del búho
Si visitas por primera vez Dijon, una de las actividades imprescindibles es el famoso sendero de los búhos. Este recorrido se compone de 22 etapas y te permitirá descubrir la parte principal del centro de Dijon. Durante el recorrido, puedes utilizar el folleto que vende la Oficina de Turismo o una app de pago disponible para Android e iOS.
La ruta se puede seguir fácilmente gracias a las flechas disponibles en el suelo a lo largo de todo el recorrido. Descubrirs edificios con una arquitectura sorprendente, casas con ese entramado de madera tan caracacterísticamente medieval y mucho más.
Pequeña anécdota: si te preguntas por qué el recorrido tiene este nombre, la explicación es sencilla, es el emblema de la ciudad .
2. La iglesia de Notre-Dame
Como hemos comentado en la introducción, Dijon cuenta con numerosos edificios religiosos; de ellos sobresale por su perfil imponente la iglesia de Notre-Dame. Sin duda una visita obligada. En primer lugar, porque encontrarás el famoso búho tallado en un contrafuerte de la iglesia. Una escultura del siglo XV que es posterior a la construcción de la iglesia. La leyenda dice que si se toca el búho con la mano izquierda y se pide un deseo, éste se hará realidad. Así que no dudes en seguir la tradición y ver tus sueños más fantasiosos hechos realidad.
En cuanto a la iglesia en sí, tiene un estilo decididamente gótico (típico del siglo XV) y un total de 51 gárgolas. El reloj es un Jacquemart que data del siglo XIV y procede de Flandes.
3. Iglesia de Saint-Michel
Situada a sólo 5 minutos a pie de la iglesia de Notre-Dame, la iglesia de Saint-Michel también merece una visita. Es un poco más reciente, ya que se construyó en el siglo XVI y es de estilo arquitectónico renacentista. Un buen puñado de ingredientes que no te dejarán indiferente.
4. Palacio de los Duques de Borgoña
El Palacio de los Duques de Borgoña es quizás el edificio más emblemático de la ciudad de Dijon. Si haces el recorrido completo del búho, pasarás por él. Es un complejo arquitectónico que incluye varios edificios:
- El Ayuntamiento de Dijon
- La Oficina de Turismo de Dijon
- Los archivos municipales
- La Torre de la Terraza (más comúnmente llamada Torre Philippe le Bon)
- La Torre de Bar
- Museo de Bellas Artes, el cual se levanta en el emplazamiento de la Sainte-Chapelle de Dijon del siglo XIX.
Si deseas visitar el interior, tendrás que pasar por la plaza de la Liberación (antiguamente llamada Plaza Real) desde la que podrás observar perfectamente todo el Palacio.
5. La Torre Philippe le Bon
Como ya te hemos comentado anteriormente, esta torre forma parte del Palacio de los Duques de Borgoña. Pero vale la pena detenerse en ella dado que desde lo alto de sus 46 metros, se puede disfrutar de una magnífica vista de la ciudad de Dijon y sus alrededores.
6. El mercado cubierto de Dijon
Dijon es una ciudad patrimonial pero también gastronómica. Y como prueba su mercado cubierto, construido a finales del siglo XIX. Nada más y nada menos que 4.000 metros cuadrados que albergan los mejores sabores olores y colores de Borgoña ¡Ahí es nada!
Empecemos por la arquitectura de este edificio: el estilo es bastante parecido al de los antiguos halles parisinos y destacan especialmente los motivos de animales utilizados para decorar las enjutas. A pesar de que, a simple vista, pueda parecer un edificio brutalmente práctico, lo cierto es que es un ejemplo muy sofisticado de la arquitectura en hierro decimonónica.
En cuanto a la gastronomía, evidentemente encontrarás de todo, por lo que te aconsejamos que aproveches las mesas comunitarias para asistir, con tu familia o amigos, a una degustación in situ. Si tienes claro que este mercado es uno de los objetivos de tu visita, te aconsejamos que reserves tus vuelos baratos a Dijon para viajar en verano: cada domingo de esta estación, entre las 11 y las 15 horas, un chef local prepara un brunch.
7. El Museo de Bellas Artes
Es uno de los museos de bellas artes más importantes de Francia. Si eres un amante de la cultura, te recomendamos encarecidamente que dediques un momento de tu estancia a visitarla. Encontrarás muchas obras de arte, desde la Antigüedad hasta el arte contemporáneo. Además, la entrada es gratuita, así que ¿por qué perdérselo?
8. El Jardín Botánico de Arquebuse
Evidentemente, Dijon cuenta con espacios verdes que podrás descubrir durante su visita. El Jardín Botánico de l’Arquebuse es uno de nuestros favoritos. Construido a mediados del siglo XIX, contiene más de 3.500 especies diferentes de todo el mundo, repartidas en más de 5 hectáreas. Un remanso de paz que merece la pena.
9. El jardín de Darcy
El jardín de Darcy es mucho más pequeño, pero con mucho encanto. Destaca su fuente en forma de concha de vieira. También se puede ver una escultura de un oso polar, algo de lo más curioso. Pero a pesar de ello, es un lugar ideal en la ciudad de Dijon para relajarse un poco durante su visita.
10. Visitar los viñedos
La zona de Dijon es una de las principales regiones vitivinícolas de Francia, por lo que sería una pena no aprovechar tu visita para hacer un recorrido por uno de los muchos viñedos de los alrededores. Puedes aprovechar las visitas que ofrece la Oficina de Turismo o simplemente ir por tu cuenta. Tú decides. Por cierto, si eres un amante del mejor vino y deseas tener a tu alcance otros destinos vitivinícolas interesantes, te aconsejamos nuestro artículo sobre todo lo que hay que saber sobre el enoturismo.
Viajar a Dijon: información práctica
¿Cuál es la mejor época para ir a Dijon?
Es preferible ir a Dijon al final de la primavera o durante el verano, porque las temperaturas son más bien bajas y las precipitaciones más frecuentes fuera de este periodo. Además, es más agradable visitar los viñedos cuando hace buen tiempo.
¿Dónde dormir en Dijon?
Con unos 150.000 habitantes, Dijon es una ciudad de tamaño medio y puedes visitarla fácilmente sin importar dónde decidas dormir. Dicho esto, si quieres encontrar un hotel en Dijon, seguimos teniendo dos preferencias:
- En el centro de la ciudad: qué mejor manera de disfrutar de un entorno excepcional y de la proximidad a los principales monumentos. Sin embargo, ¡cuidado con los precios en temporada alta!
- Arquebuse: en el cruce entre el jardín de Arquebuse y la estación de tren, este barrio es una fusión ideal entre proximidad y tranquilidad. Además, los precios son más bajos que en el centro de la ciudad.
¿Cómo moverse por Dijon?
No es esencial el uso del coche para sus desplazamientos en Dijon. De hecho, la ciudad no es muy grande y la red de autobuses y tranvías es eficiente. Además, podrías tener problemas para encontrar aparcamiento en determinadas zonas.
Para desplazarse por Dijon, tiene varias opciones:
- Transporte público. El coste unitario de un billete es de 1,4 euros y se puede viajar de forma ilimitada por 4,2 euros.
- También hay bicicletas de autoservicio. Como turista, puede comprar una tarjeta de 24 horas o 7 días para utilizar este servicio.
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