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El Magazine del Viajero
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A tan sólo unos cien kilómetros de Huelva se encuentra el Algarve, un paraíso natural, lleno de paz, pero también de la mejor entretención para el verano. Su variada costa, sus paisajes rocosos y una enorme oferta hotelera, hacen de este rincón de Portugal, el punto turístico más importante de este país y un deleite para los sentidos.

La parte sur de Portugal es uno de los destinos turísticos más solicitados por el norte de Europa y sobre todo por el turismo inglés. ¡Y cómo no si goza de un perfecto clima templado todo el año!. El paisaje natural de la región ofrece espectaculares bahías, acantilados que se hunden en el mar limpio y claro que ofrece una gran variedad gastronómica.

La provincia de Algarve (de “al Gharb”, “Jardín de occidente”) corresponde al distrito de Faro, y está bañada por el Océano Atlántico a lo largo de su costa, al este con España y al norte con el río Alentejo y la región que lleva el mismo nombre.

El paisaje de este particular lugar se caracteriza por mesetas que no superan los 400 metros y valles poco profundos. Los turistas están atraídos principalmente por los 160 kilómetros de playas distribuidos en tres regiones: el Sotavento (“viento”), que va desde el Faro hasta la frontera española y se caracteriza por playas de arena fina y plana, el Barlovento (“bajo el viento”) con playas solitarias encerrada por acantilados escarpados de forma extraña, y por último, al sur-oeste de Lagos a San Vicente, la zona más árida y ventosa.

Lagos, Portugal
Centro histórico de Lagos, Algarve

Las dos ciudades más grandes, Faro y Lagos, destacan por sus obras de arte y azulejos. Éstas son pintadas a mano y se pueden encontrar en muchas iglesias y palacios de todos los pueblos de la zona, obras que se heredan directamente de la cultura hispano-árabe, (del árabe “az-zulaj”, pieza de arcilla) con una fuerte influencia del cuatrocientos de la mayólica italiana.

Al oeste de Faro se encuentra Albufeira, el balneario más popular y más visitado de esta región con sus típicas casas blancas y un laberinto de estrechos callejones. A pesar de la notoriedad de Albufeira es todavía un lugar distintivo y atractivo. Los acantilados de rocas de color rojizo, la playa de los pescadores y su afloramiento rocoso hacen de este lugar un pintoresco escenario ibérico.
Aunque la mayoría de los visitantes viajan a esta provincia portuguesa por sus espectaculares playas, en los últimos años la variedad en su oferta turística ha cambiado bastante. Han sucedido una serie de eventos deportivos que han convertido el Algarve en una región cada vez más famosa e internacional. El 2004, año de la Eurocopa, los eventos deportivos como el mundial de voleibol, los mundiales de golf en 2006 y 2007 y algunas etapas de Lisboa-Dakar de rally demuestran que este rincón portugués es más que un simple punto de vacaciones.

Fotos: Wikipedia

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