Australia es uno de esos lugares del mundo que, aunque no hayamos visitado nunca, pueden llegar a formar parte de nuestro vocabulario. En efecto, cuando esperamos y esperamos y nada llega decimos que X se fue a coger patatas al huerto o, en su defecto, que debe estar viniendo desde Australia, cuando queremos desaparecer del mapa decimos que cogeremos un billete sin vuelta a Australia. No hay duda, pues, de que Australia nos cae… lejos.
Aprovechando que en 2013 se celebra el centenario de la proclamación de Canberra como nueva capital del país, hemos querido investigar cómo acercarnos un poco más a ella, ¿te apetece aprovecharlo para llegar a un mundo desconocido?
La súbita proclamación de capitales no es un hecho del todo habitual, por esto la historia de la creación de Canberra resulta curiosa. La palabra “Canberra” significa “punto de encuentro” en la lengua aborígena de los Gundungurra, la civilización que habitada los territorios australianos antes del asentamiento europeo. Ante la disputa que buscaba discernir cuál era la mejor ciudad para capitalizar la nueva Australia, con Sydney y Melbourne como candidatas, se llegó al acuerdo, en cierto sentido pacificador, de que la nueva capital se situaría en la actual región de Canberra.
En 1913, Canberra fue proclamada primera ciudad del país, sustituyendo así a Melbourne (que había estado albergando la sede del parlamento hasta entonces).
La inauguración oficial del centenario tendrá lugar durante el mes de marzo, coincidiendo con la celebración anual del aniversario (el 12 de marzo). El programa incluirá eventos y proyectos pensados expresamente para festejar el centenario, aunque el propósito central de la organización es dar a conocer la naturaleza dinámica de la capital, subrayando y vistiendo para la ocasión todas aquellas iniciativas y eventos que año tras año contribuyen a hacer de Canberra lo que realmente es.
Algunos de estos grandes eventos son el festival de primavera de la Floriade (15 septiembre – 14 octubre), los “100 días del cristal”, que incluirá muestras, talleres, exposiciones y charlas sobre el arte de trabajar el cristal, la fiesta gastronómica de los truffles, el lanzamiento masivo de globos de aire que colorearán el cielo de la ciudad bajo el nombre de “Canberra Balloon Spectacular”, el “Festival de Música Internacional” de Canberra o la magia de la luz de las velas que la capital australiana celebra en consonancia con su ciudad hermana de Nara, en Japón. Además de diversas exposiciones fotográficas, ferias de vinos o festivales de cine.
Aquí podéis consultar el inmenso programa, dividido en tres secciones coincidiendo con las estaciones del año. Y, desde aquí, empezar a volar hacia la otra punta del mundo.