Se las denomina casas cueva, pero no están dentro de ninguna gruta ni hoquedad dentro de la tierra. Son casas excavadas en lugares con abundancia de arenisca o yeso y que, incluso hoy en día, permanecen habitadas. La razón: mantienen una temperatura muy agradable por debajo de los 20 grados. Algo que se agradece, dados los sitios en los que muchas de ellas se ubican. Te mostramos las más interesantes, aunque no sin antes avisarte de que hemos optado por hacer un ranking de las casas cueva tradicionales. Hoy en día vivimos un boom del alojamiento original, por lo que en los últimos años se han construido casas cueva totalmente modernas y actuales. Eso no quita que las tradicionales, las que vamos a ver, puedan alquilarse para disfrutar de unas vacaciones.
Las casas cueva de Arnedo (La Rioja)
En la Rioja Baja se encuentra este ejemplo de casas cueva que hasta hace bien poco (hasta los años 50) estuvieron habitadas. Son impactantes vistas desde fuera, sobre todo desde el cerro San Miguel, donde podrás ver las hoquedades que dan paso a su interior. Tres de ellas pueden visitarse desde 2014 y podrás hacerlo para hacerte una idea de cómo era la vida cotidiana bajo su techo. Están totalmente amuebladas, lo que aumenta la sensación de realismo. Probablemente la más famosa es la llamada Cueva de los Pilares, que presenta, como su propio nombre indica, una interesante estructura de pilares tallada en la piedra.
Casas cueva de Setenil de Bodegas (Cadiz)
Setenil de Bodegas es una localidad popular y, de hecho, una de las más bellas en la ruta de los pueblos blancos de Andalucía. Enclavado en el cañón formado por el río Guadalporcún, uno de sus principales atractivos son las casas cueva. Un atractivo que está muy presente incluso en el callejero. Por ejemplo, en las calles Cuevas del Sol y Cuevas de la Sombra. Probablemente la estampa más conocida es la que brinda esta última aunque si quieres obtener bonitas panorámicas de la localidad lo mejor es que te desplaces al Mirador del Carmen para hacerlo.
Casas cueva de Guadix
A apenas 45 minutos en coche de Granada se encuentra Guadix, un pueblo que sólo por su catedral y su teatro romano merece una visita. Pero es que también alberga uno de los complejos de viviendas cueva más grandes de todo el mundo. De hecho 2.000 de ellas están habitadas hoy en día. El entorno natural de cárcavas no es menos impresionante, aunque lo mejor es que entremos en una de ellas. Lo mejor para ello es dirigirnos al Centro de Interpretación donde nos informarán de todos los pormenores. Si te fascina este lugar, incluso puedes alquilar una de estas casas. Algo que, si visitas la localidad en verano, te puede convenir dado la buena temperatura, entre 19 y 22 grados, que hay en el interior de estas casas.
Casas cueva de Chinchilla (Albacete)
Chincilla de Montearagón (también llamado, a secas, Chinchilla) es un pueblo que ya sólo por su castillo merece la pena visitar. Pero si lo que te atraen son las casas cueva, has de saber que las que alberga este municipio datan de la época árabe, aunque después de la conquista cristiana en el siglo XVI su construcción se potenció. Por lo demás, tienen un look que ya nos resulta familiar. Pintadas de blanco y con su pintoresca chimenea son un auténtico homenaje a la fusión entre el hombre y la naturaleza. Y si quieres descubrir como se vivía allí, no necesitas más que, simplemente, alquilar una.
Casas cueva de Jorquera (Albacete)
A los pies del río Júcar en Jorquera se encuentran estas casitas tradicionales excavadas en cueva que, aunque parezca mentira, estuvieron abandonadas hasta hace muy poco. Sólo con el proyecto de rehabilitación, que las ha convertido en resorts, estas casitas han podido volver a lucir acogedoras como antaño. Para verlas por dentro no podrás más que alquilarlas, dado que hoy en día pertenecen a los resorts XUQ. Una buena opción, por otra parte, para hacer una inmersión total en la España rural de la mano de una de las provincias más injustamente desconocidas de todo el país.
¿Te animas a alojarte en una de ellas? ¿Ya has estado en alguna? ¡Cuéntanoslo en los comentarios.