El Rijksmuseum, o Museo Nacional de Ámsterdam, inaugurado en el año 1800 bajo el modelo del parisino Louvre, es uno de los museos más impresionantes del mundo por albergar obras de artistas del talante de Rembrandt, Rubens o Vermeer. Tras las grandes inversiones en remodelación que se empezaron durante el año 2004, finalmente el próximo día 13 de abril el Rijksmuseum reabrirá sus puertas, albergando todas sus antiguas grandezas y luciendo, al mismo tiempo, una cara absolutamente nueva y modernizada.

Las obras de renovación han durado casi 10 años y se han llevado a cabo con el fin, entre otros, de disponer las instalaciones del museo y, sobretodo, el contenido que se exhibe, en sintonía con el siglo XXI, permitiéndole así jugar un rol fundamental en la cultura y la educación actuales. En la misma línea, la apertura de esta nueva época del Rijksmuseum se propone que el arte y la historia encuentren su lugar propio entre la sociedad contemporánea a través de la organización de eventos exclusivos.

Si la apertura promete es también por el alto nivel técnico y artístico de los cambios hechos durante este último decenio. Las remodelaciones estructurales se han llevado a cabo de la mano de los arquitectos sevillanos Antonio Cruz y Antonio Ortiz, escogidos por sus altas competencias técnicas, su capacidad imaginativa y su punto de vista purista. El diseño interior, por otro lado, ha sido desarrollado bajo las instrucciones del parisino Wilmotte, responsable también del diseño del museo del Louvre.

El director general del Rijksmuseum, Wim Pijbes, describe la inauguración de este próximo 13 de abril como la apertura de un museo en base al buen gusto, la audacia, la imaginación y el optimismo. Por el momento, pues, todo parece indicar que esta reapertura conllevará, en una misma toma, dosis de recuperación e innovación, algo inmensamente valioso en los tiempos actuales. Y, para poder descubrir el resto, habrá que vivirlo en persona.