El Magazine del Viajero
El encanto de Sicilia radica en su rica cultura: es el sitio del mundo con más lugares reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco por kilómetro cuadrado. Su magia inunda cada rincón por sus maravillas arquitectónicas y legados históricos, pero sobre todo destaca por la desbordante personalidad de su gente.
Sicilia es la isla más grande del mediterráneo y es la región más extensa de Italia con 25.711 km. Su capital, Palermo, es la ciudad más densamente poblada después de Malta, con cinco millones de habitantes. De hecho, para viajar a Sicilia, te recomendamos buscar vuelos a Palermo.
El Etna, el volcán más activo de Europa, se encuentra en la zona este de la isla y se presenta como protagonista en Sicilia, como si el gran carisma de este pueblo italiano fuese a explotar en cualquier momento. Para llegar hasta allí se debe viajar hasta Catania en donde es aconsejable coger la ruta que se dirige a Nicolosi, última parada antes de entrar en el parque nacional donde comienzan las últimas lavas del Etna en el período 1984-2001. Encontrarse tan cerca de las erupciones volcánicas es una experiencia inolvidable y uno de los atractivos turísticos más importantes de la isla.
Pero si tenemos que hablar de ciudades no podemos dejar de lado Taormina, una verdadera perla frente al mar, una terraza natural sobre la cima del Monte Tauros. Su teatro griego, sus preciosas vista a la bahía de Naxos y la foto postal del Etna de fondo, hacen que este lugar sea uno de los más visitados por los turistas.
Sicilia es también conocida por conservar el conjunto de templos greco-romanos mejor cuidados del mundo. Una muestra de su majestuosidad son las ruinas romanas de Agrigento, Selinunte y Segesta, tres ciudades al sur de la isla, un deleite para los viajeros amantes de la historia y hermosos paisajes. Todos estos elementos se reúnen en estas tres zonas rebosantes de grandiosos templos, paisajes de verde mar cristalino, fotos perfectas para enmarcar.
Pero como bien se dice “No hay Sicilia, sin Palermo”. Esta capital encanta por sus pequeñas calles, mezclas arquitectónicas y riqueza cultural, pero al mismo tiempo por una gente muy hospitalaria y una gastronomías excepcional. El italiano del sur se ve reflejado en este Palermo que acoge con la espontaneidad y alegría de sus habitantes. Sus platos típicos son todos relacionados con el mundo marino como por ejemplo, el “antipasto di frutti di mare” o “la pasta al nero di Seppia”.
Sin duda alguna Sicilia es una isla apasionante que explota todo lo bueno de unas vacaciones completas. Playas paradisíacas, anfiteatros greco-romanos perfectamente conservados, un verdadero regreso a la historia y una gente próxima y preparada para recibir al viajero.
¿Te apuntas a viajar a Sicilia este verano?
Es cierto: No hay Sicilia, sin Palermo. 🙂 Aunque la isla ofrece mucho más, es muy grande por esta razón es conveniente combinar varias rutas.
¡Enhorabuena por el post!!
Y lo sería si las conexiones aéreas fuesen mejores, y es que precisamente en los últimos tiempos han tumbado algunos vuelos directos. Lástima.