Asistir a un concierto sinfónico va mucho más allá de un placer puramente auditivo. También es increíble como experiencia. La emoción de oírles afinar, el sentimiento que tanto los músicos como el director pueden llegar a transmitir en un determinado pasaje… Sin duda, vale la pena asistir a uno de estos conciertos. Si eres un melómano seguro que ya lo sabes. Pero si te apetece hacer tus pinitos en la música clásica al mismo tiempo que viajas, este artículo es para ti. Así que, ¡toma asiento y abre bien los oídos! Aunque si quieres explorar un poco más el mundo de la música, aquí te dejamos los teatros de ópera más bonitos del mundo, los mejores destinos melómanos del mundo y las ciudades donde ver los conciertos de Año Nuevo.
Orquesta Filarmónica de Berlín
Los países germanohablantes son tradicionalmente muy potentes en lo que se refiere a orquestas. Algo nada de extrañar dado que su tradición musical, tanto compositiva como interpretativa, ha descollado en el panorama musical durante siglos. Y quien tuvo, retuvo. La Filarmónica de Berlín es, sin duda alguna, una de las mejores orquestas del mundo. Fundada en 1882, ha sido destino de muchas grandes figuras de la dirección de orquesta como Celibidache, Abbado, Karajan o Furtwängler, por ejemplo. Todavía lo es hoy, así que nada mejor si te pasas por Berlín que ir a uno de sus conciertos. Tienen lugar al ya de por sí atractivo auditorio Berliner Philarmonie. Además, cuentan con una programación variada que también tiene en cuenta a las familias. Por tanto, es posible asistir con niños a conciertos específicos.
Orquesta Filarmónica de Viena
Es la orquesta que casi todo el mundo ha oído aun sin saberlo. Y es que es la agrupación sinfónica que ejecuta los valses del Concierto de Año Nuevo. Pero lejos de este acto anual, la Filarmónica de Viena, fundada en 1842, se ha distinguido desde sus inicios por ser una de las agrupaciones más prestigiosas del mundo. Echemos si no un vistazo a la gente que ha trabajado allí. Encontraremos a directores de la talla de Mahler, Solti, Karajan, Muti o Carlos Kleiber, entre otros muchos. Sus conciertos tienen lugar en el famoso edificio Musikverein de Viena. Un edificio cuya sala de conciertos tiene una de las mejores acústicas del mundo. La conocerás porque es el lugar donde tiene lugar cada año el Concierto de Año Nuevo.
Real Orquesta del Concertgebouw de Ámsterdam
Fundada en 1888 es una de las mejores orquestas del continente europeo. Es, además, una de las más visitadas, dado que acoge al año a casi 900.000 asistentes. El secreto de su éxito es una consolidada tradición de excelencia (gracias a directores como Ernest Ansermet y Bernard Haitink), una gran programación y unos intérpretes fuera de serie. Su auditorio cuenta con dos salas de conciertos, una más grande con capacidad para 2000 personas y otra más pequeña, de forma oval, para conciertos de cámara. Si te pasas por Ámsterdam y no estás seguro de querer pagar mucho para escucharla, siempre puedes pasarte los miércoles a las 12:30 a algún ensayo abierto.
Orquesta Sinfónica de Boston
No todo lo mejor está en el Viejo Continente. La Orquesta Sinfónica de Boston, fundada en 1881, forma parte de las Big Five. Es decir, de las cinco mejores orquestas estadounidenses (donde también se incluyen la de Nueva York, Cleveland, Chicago y Filadelfia). El auditorio donde realiza sus conciertos, el Symphony Hall, está considerado como una de las salas de conciertos con mejor acústica del mundo. También cuenta con una potente tradición, habiendo tenido en nómina a directores de la talla de Koussevitzky, Ozawa y Levine. Y habiendo estrenado obras capitales de Stravinsky, Prokofiev y Bartók. Además, es una de las mejores representantes de lo que se ha considerado el signo distintivo de las orquestas estadounidenses: la brillantez y espectacularidad.
Orquesta Nacional de España
Si te apetece asistir a un concierto de música clásica a cargo de una gran orquesta sin salir al extranjero, siempre puedes darte un salto a Madrid. La Orquesta Nacional de España, fundada en 1937 (en plena guerra civil), da sus conciertos en el Auditorio Nacional. Su programación es variada y cuenta con la participación de directores e intérpretes nacionales e internacionales de excepción. Aunque es una joven orquesta si la comparamos con la longevidad de las otras integrantes de esta lista, también cuenta con una buena tradición. Por ejemplo, fue allí donde se estrenó el celebérrimo Concierto de Aranjuez de Rodrigo. También ha tenido como directores titulares a músicos de la talla de Ataúlfo Argenta, Frühbeck de Burgos, Jesús López Cobos y Josep Pons. En resumen: una gozada.
Orquesta Sinfónica de Londres
La Orquesta Sinfónica de Londres es otra de las grandes orquestas europeas. Fundada en 1904 ha sido liderada por batutas de excepción como la de Thomas Beecham, Pierre Monteux, Claudio Abbado, André Previn o Valery Gergiev. Su programación es diversa y, ocasionalmente, se realizan conciertos destinadas para familias. Además, sus interpretaciones tienen lugar en el famoso Barbican Center de Londres, uno de los centros culturales más grandes de Europa.
Orquesta Filarmónica de San Petersburgo
Fundada en 1882, es la orquesta filarmónica más antigua de Rusia. Un aspecto que ya le otorga una tradición en un país con unas fuertes credenciales en el mundo de la música clásica. De hecho, grandes figuras de la dirección orquestal como Mravinsky y Termikánov se pusieron al frente de esta agrupación. Y muchas obras de compositores como Shostakovich fueron estrenadas por sus intérpretes. En definitiva, una orquesta gourmet que cuenta con dos auditorios diferenciados en la imperial San Petersburgo.
IMG: iStock