El Magazine del Viajero
Todos sabemos que es práctica generalizada en las aerolíneas el que sus trabajadores puedan viajar gratis o a precios muy reducidos siempre que haya disponibilidad en el vuelo, un atractivo con el que muchos hemos soñado en algún momento. Pero hay quien ha dado un paso más y ha viajado como piloto… sin serlo.
Turín, Italia, un hombre de 32 años, desempleado, es detenido en las instalaciones del aeropuerto tras aterrizar en un vuelo de la alemana Lufthansa procedente de Múnich. Su atuendo es el de un capitán de vuelo, un detalle que debido a su juventud hizo sospechar a los supuestos compañeros de profesión que algo fallaba en su historia.
El autoproclamado piloto se colaba en las cabinas de piloto, pero afortunadamente no con la intención de pilotar, si no por el simple hecho de poder viajar gratis. Una idea que por momentos puede parecer hasta brillante para el capitán Andrea Sirlo, cuyo auténtico nombre es el de Andrea Pasquino.
Lo cierto es que el juego le salió realmente bien durante un tiempo, de hecho se desconoce en cuantos vuelos exactamente viajó como tercer piloto antes de ser detenido.
A parte del vuelo de Munich, se le detectó en otro de la aerolínea Air Dolomiti, allá por el mes de abril. Sin embargo, no se sabe cuando comenzó ni cuántos vuelos tomó hasta su detención.
Su estrategia se basaba en su capacidad de convicción, pues tras ponerse el atuendo adecuado y elegir la falsa acreditación subía a la cabina y se ponía a charlar con los pilotos, a persuadir a la tripulación,… hasta que conseguía sus objetivos.
Curioso, llamativo,… y una forma de poner más que en duda si la seguridad aeroportuaria, pese a la paranoia que la acompaña desde los hechos del 11 de septiembre, es realmente eficiente o tan solo incómoda.
Sea como fuere, ¿qué os parece a vosotros la historia y sus dobles lecturas?
