Viaja desde casa a 6 países del mundo a través de sus sabores y olores.
La cocina resume como pocas manifestaciones culturales la esencia de un lugar. Sus colores, sus sabores, sus costumbres, sus productos y su historia. Es por ello que te traemos algunas de las recetas más interesantes y tradicionales del mundo. Platos que puedes elaborar en casa fácilmente y con ingredientes habituales. Además, hemos optado por la sencillez de elaboración para que los más peques puedan entretenerse ayudando. ¡Bon appetit!
Matoke (Uganda)
La cocina africana es relativamente desconocida y lo cierto es que contiene platos que son una auténtica delicia. Es el caso, por ejemplo, del Matoke, un plato ugandés que consiste en un estofado de pollo con plátanos. No es obligatorio que la carne sea de pollo sino que puedes probar con otras carnes como la ternera. Los ingredientes requeridos son fáciles de encontrar e incluyen, además de la carne y los plátanos, harina de freír, cebolla, mantequilla, 100 ml de leche, sal, pimienta y una cucharadita de jengibre. No es excesivamente difícil prepararlo y el tiempo de preparación apenas supera la hora.
Kalampolo (Irán)
La cocina iraní tampoco es tan conocida si la comparamos con lo que sabemos de otras gastronomías colindantes, aunque es deliciosa y muy sofisticada. No es para menos dado que la cultura persa es milenaria, ¡y la experiencia siempre es un grado! Si te apetece probar con los sabores y los olores de Oriente Medio, el Kalam persa es una gran opción. Los ingredientes necesarios se encuentran en cualquier despensa: arroz, repollo, carne picada, pasas, curry en polvo, aceite y sal. Es básicamente un sofrito de estos ingredientes al que se añade posteriormente la col y el curry. Fácil, rico…¡y con fundamento!
Succotash (América del Norte)
Este plato originario de los nativos norteamericanos se ha incorporado fácilmente a la gastronomía de todo el país, siendo un plato habitual en el Acción de Gracias. Además, su fácil preparación y sus ingredientes sencillos lo convirtieron también un un plato muy frecuente en las mesas norteamericanas durante la Gran Depresión. Esta receta incluye, como no podía ser de otra manera, el omnipresente maiz, frijoles y otros ingredientes que pueden escogerse un poco al gusto pero que suelen ser cebollines, pimientos y pimienta. El plato es muy versátil y puedes cocinarlo como una ensalada o bien haciendo un sofrito de los ingredientes para presentarlo como plato o como acompañamiento a carnes y pescados. ¡Tú eliges!
Tabbule (Líbano)
Como contrapunto, ahora te traemos un plato frío y más ligero también de muy fácil elaboración muy habitual en las mesas del mundo árabe sobre todo en los meses de verano. Se trata de una receta originaria de Líbano que requiere de ingredientes habituales en cualquier casa como arroz, trigo (o cuscús), ajo, perejil, aceite, lechuga, zumo de limón y sal. Es básicamente una ensalada elaborada con esos ingredientes que en los países de Medio Oriente e incluso Norte de África suelen comer tanto solo como acompañamiento.
Vinegret (Rusia)
Una auténtica ensalada rusa que puede comerse sola o como acompañamiento a carnes rojas y blancas. En Rusia suele prepararse como entrante y completarse con un buen lingotazo de vodka. Los ingredientes requeridos son remolacha, zanahorias, cebolla, pepinillos, vinagre blanco, jugo de limón y aceite. No hay más que cocer la remolacha y las zanahorias y a continuación añadirle los demás ingredientes convenientemente aliñados. Puedes añadir mayonesa si prefieres un plato más cremoso. ¡Incluso puedes incluir arroz! El resultado: un delicioso plato muy versátil que te trae los sabores y olores típicos de Europa del Este.
Brigadeiros (América del Sur)
Terminamos la lista como hay que terminar: con un buen postre. En este caso los brigadeiros, también llamados negrinhos, originarios de Brasil. Es un postre delicioso, con ingredientes muy fáciles de conseguir, además muy sencillo de preparar. Para elaborarlo no necesitarás más que leche condensada, cacao, mantequilla y fideos de chocolate. Además, si te ha gustado puedes experimentar con todo tipo de sabores. Por ejemplo, ¿qué tal probar con los brigadeiros de coco? En el país carioca han adquirido un gran virtuosismo en la elaboración de brigadeiros; su gran variedad de sabores y formatos podrás conocerlos en su día con unos vuelos baratos a Brasil, pero mientras tanto, ¡manos a la masa!