TAM Airlines, la mayor aerolínea de Brasil, ha realizado con éxito lo que llamó “el primer vuelo experimental movido con biocombustible en América Latina”. El vuelo, llevado a cabo en un Airbus A320 adaptado, tuvo una duración de 45 minutos.
El combustible usado para llevar a cabo la combustión de este Airbus A320 está hecho a partir de semillas de uno de los árboles típicos de Brasil, el Jatropha. Este biocombustible ha sido mezclado al 50% con el queroseno usado convencionalmente por la industria aeronáutica. Por este motivo, este vuelo experimental realizado el lunes pasado frente a la costa de Río de Janeiro no puede denominarse como un vuelo 100% verde.
Las pruebas con biocombustibles forman parte de un proyecto conjunto entre TAM, Airbus y el fabricante de motores CFM International, esta última una compañía participada por la norteamericana General Electric y la francesa Snecma.
El vuelo realizado el lunes pasado es el sexto vuelo de este tipo a nivel mundial y el primero llevado a cabo en América Latina. Según las palabras del presidente de TAM Airlines, Líbano Barroso, “la compañía espera crear una plataforma para la aviación sostenible de Brasil gracias al biocombustible”. A su vez, apuntó que el cultivo de Jatropha no amenaza la producción y suministro de alimentos ya que no es un producto comestible y es posible su cultivo junto al de alimentos.
Cabe recordar que Brasil es uno de los países pioneros en la utilización de biocombustible. Aquí, muchos coches funcionan con lo que ellos llaman “alcohol”, es decir, biocombustibles de caña de azúcar, aceite de coco o Jatropha. El Jatropha es un tipo de arbusto que crece en zonas tropicales de África, el Caribe y que en Brasil se cultiva en medio de otro tipo de plantaciones como el café o los plátanos.
En el caso de su uso en la aviación comercial, la combustión de biocarburantes obtenidos a partir de Jatropha producen entre un 65 y 80% menos de carbono que el queroseno derivado del petróleo.