Arte y naturaleza en perfecta fusión.
El budismo es una de las religiones con más fieles de todo el mundo. De hecho, algunos budistas aseguran que si China realizara un recuento de las confesiones existentes en el país, la confesión de Siddharta sería la religión con más fieles del mundo. Sea como fuere, el budismo es una religión de una importancia incontestable. Especialmente a nivel artístico, donde nos ha dejado auténticas maravillas. Sin ir más lejos sus templos. Sin embargo, en esta ocasión queremos darnos una vuelta por una de las creaciones artísticas del budismo más singulares e irrepetibles: las esculturas de Buda. Auténticos mastodontes de piedra ubicados en los lugares más imprevistos. Y, para seguir explorando esculturas de excepción, te dejamos nuestros artículos sobre las esculturas más grandes del mundo y las esculturas más raras y curiosas del mundo.
Gran Buda de Leshan (China)
¿Qué mejor que empezar la lista por el buda más grande del mundo? Con una altura de 71 metros, se trata de una escultura localizada en la provincia de Sichuan que representa a un Buda sedente y con las manos apoyadas en las rodillas. Y como detalle de gran belleza, dos ríos discurren justo a los pies de la escultura. Su antigüedad es de aproximadamente 1.300 años, algo que no debe extrañarnos dado que el budismo es una religión más antigua incluso que el cristianismo. Y, como no podía ser de otro modo, es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Además, en el mismo complejo se encuentra la conocida como Gruta de los 10.000 budas. Como bien dice el nombre se trata de todo un despliegue de representaciones del gran líder espiritual.
Gran Buda de Kamakura (Japón)
Sin duda una de las representaciones más icónicas de Buda. Se trata, más en concreto, de la representación de un Buda Amida, un buda celestial típico de una de las ramas del budismo Mahayana. La escultura, aunque no es colosal (cuenta con 14 metros de altura) si es imponente. Probablemente porque fue realizada en bronce allá por el siglo XIII. Lo más interesante es que se trata de una escultura hueca que puede visitarse interiormente. De hecho, cuenta con dos pequeñas aberturas para poderla ventilar.
Buda reclinado (Tailandia)
Dejamos por un momento las tipologías de buda sedente para admirar otra de sus representaciones más populares: la del Buda reclinado. Según dicta la tradición, esa fue la postura que adoptó el Iluminado poco antes de expirar. Existen muchas esculturas de este tipo, aunque una de las más interesantes es la que se ubica en Bangkok, la más grande de esta tipología en toda Tailandia. Sus 46 metros de largo y 15 metros de altura y el recubrimiento con pan de oro convierten a esta escultura en una de las más impresionantes que puedas disfrutar. Sólo tienes que darte un salto al Templo de What Po cuando visites Bangkok.
Gran Buda de Tian Tan (China)
En esta ocasión nos vamos a la isla de Lantau, en Hong Kong, para admirar una escultura de Buda bastante reciente. Terminada en 1993, se alza sobre el paisaje circundante con la solemnidad que le otorga el bronce y, sobre todo, sus 34 metros de altura. Se encuentra cercano al Monasterio de Po Lin, lo que puede complementar tu visita. Eso sí, si quieres subir a sus pies, recuerda que se ubica en lo alto de una colina. Por lo que tendrás que ascender por unas escaleras de 240 peldaños. Aunque si, al igual que Buda, desprecias el dolor, lo mejor es que optes por llegar a ella en teleférico.
Gran Buda de Bodh Gaya (India)
No podíamos dejar fuera de la lista a un Buda gigante de la India, país que fue la cuna del budismo. De hecho, está ubicada en la localidad de Bodh Gaya, donde se piensa que Buda alcanzó finalmente la iluminación. Es por ello que está representado en una posición de meditación (con las dos manos sobre el regazo). La escultura mide 24 metros y está hueca, por lo que puedes acceder a su interior. De hecho una escalera en caracol te proporcionará el ascenso hacia lo más alto: la cabeza de Buda. Además, en este trayecto podrás contemplar los miles de relieves en bronce de Buda. ¿Se puede pedir más?
Budas de Monywa (Myanmar)
Cambiamos de registro, esta vez con una escultura de Buda en postura erguida. Para encontrarla hemos de desplazarnos a Myanmar; es decir, Birmania. Nada más y nada menos que 136 metros de escultura sobre un pedestal de 13 metros. Un tamao que la convierte en la tercera escultura más alta del mundo. Concluida en 2008 cuenta con una acompañante no menos colosal: la figura de un Buda reclinado. La visión de ambas estatuas desde la lejanía es auténticamente impresionante. Además, si quieres enriquecer la visita, te aconsejamos que aproveches que estás en Monywa para visitar la Pagoda Thanboddhay, un conjunto de templos budistas que alberga nada más y nada menos que 600.000 imágenes de Buda.