Espacios naturales desde los que observar el cielo estrellado

El cielo estrellado, tan simple como complejo en su observación, un elemento que parece casi desterrado de nuestro mundo. La contaminación lumínica tan extremadamente presente en nuestra sociedad, en especial en este país, destruye algunas de las imágenes más bellas posibles… Pese a todo, aún quedan parajes en los que alzar la mirada hacia el infinito tiene una preciosa recompensa…

Hasta hace no mucho tiempo, a lo largo del siglo XIX, la noche se iluminaba gracias a la luna ayudada por candelabros. Sin embargo, la extensión en el uso de la electricidad llevó la luz casi hasta el último rincón habitado por el hombre… lo que incluye allí donde no se necesita… Es entonces, en ese preciso momento, cuando ese momento mágico de observar las estrellas al abrigo de la noche se hizo algo realmente complejo, incluso casi imposible.

Hace un tiempo ya que los científicos luchan contra esa contaminación lumínica, es el llamado proyecto “Dark Sky” (Cielo Oscuro). Algo que refleja el absurdo de la extrema iluminación, símbolo de ostentación y derroche, es el caso del observatorio astronómico de Granada, el cual se ve terriblemente afectado por la contaminación lumínica de… Málaga… Un claro ejemplo de la locura e hiperiluminación en la que vivimos.

Ahora, a la necesidad imperiosa de proteger nuestro entorno natural más cercano, llega el momento de proteger la visión de un cielo estrellado que nos lleva de nuevo a tomar conciencia de nuestra propia realidad, de nuestra nimia posición en el universo. Bienvenidos al proyecto que ilumina la naturaleza de los cielos, bienvenidos a los Espacios Protegidos Dark Sky.

NamibRand – Namibia

NamibRand, una de las mayores reservas naturales de África. Cuenta con una flora y una fauna excepcionales, aunque no es todo, también se busca la protección de un cielo nocturno cada vez más agredido. Los pueblos más próximos se encuentran a unos 100 km de la reserva, y no se trata de grandes ciudades, con lo que la contaminación lumínica no ha llegado a su firmamento.

Parque Nacional de Exmoor – Inglaterra

El que puede ser casi el único cielo “limpio” de la vieja y maltrecha Europa, lo cielos más oscuros del Reino Unido son además de muy fácil acceso. Con un coche de alquiler en Londres nos podemos desplazar hacia los condados de Devon y Somerset, llegaremos a nuestro destino en menos de 4 horas. Los mejores puntos para observar el universo son Holdstone Hill, County Gate, BredonTwo Gates y Wimbleball Lake.

Parque Nacional Mont Mégantic – Quebec, Canadá

“La experiencia universal es tan dramática como inspiradora, la observación de las estrellas despierta nuestra conciencia y nos hace sentir un vínculo misterioso con el universo. Las sensaciones de infinito y eternidad, el espectáculo del cielo nocturno nos conecta con nuestros más lejanos antepasados. Sin embargo, esta verdad aparentemente inmutable, este invaluable patrimonio cultural corre un grave peligro de extinción” – según se desprende de la web del parque

Este espacio, dedicado a la protección de los cielos a los largo de 5.500 km ², cuenta además con un observatorio. Los visitantes pueden disfrutar tanto de día como de noche del rol que juega la astronomía en Quebec y, por tanto, en Canadá.

El observatorio, básicamente un centro de investigación, abre al público dos noches al año, el mismo momento en el que se celebra la “Fiesta de la Astronomía Popular de Mont – Mégantic”. Un evento muy recomendable…

Y vosotros, ¿cuándo fue la última vez que observásteis el cielo nocturno? ¿Cual es vuestro sitio preferido para hacerlo?

Foto: Jurvetson / Flickr CC namibrand.com, el astrolabio-national-park-Mont-megantic.org