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El Magazine del Viajero
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Grecia es un país único que vale la pena descubrir. Vamos más allá de los típicos lugares frecuentados por turistas, para buscar la esencia más auténtica y pura de este místico país con un largo recorrido histórico.

Los dos lugares más conocidos en el panorama turístico son, sin duda, Atenas y Mikonos. Sin quitarle mérito a estos dos lugares, ambos encantadores e interesantes de conocer, proponemos seis alternativas que no tienen nada que envidiar a los anteriores. Grecia es un destino por descubrir turísticamente, ya que hay lugares que no han recibido la popularidad que se merecen. Si bien es cierto que para encontrar vuelos baratos a Grecia la mayoría de compañías vuelan directamente a Atenas, sin embargo, siendo éste el centro de operaciones turísticas, las conexiones de transporte no están nada mal organizadas.

No obstante, para viajes en los que se desea exprimir al máximo el país recomendamos el alquiler de coches en Grecia. No es complicada hacer una ruta por varios de los lugares que proponemos si poseemos de un vehículo propio.

Y para seguir explorando el país, te aconsejamos nuestros artículos sobre qué ver en Atenas, las playas más bonitas de Grecia y qué ver y hacer en Creta.

Meteora

Meteora es un valle localizado en el norte de Grecia, en la llanura de Tesalia, donde han crecido colosos de piedra de 600 metros de altura. En lo alto de estos colosos se construyeron hace más de 700 años varios monasterios. Estas maravillas son Patrimonio de la Humanidad, como puede deducirse. Y no es de sorprender que este sea uno de los lugares de Grecia y del mundo entero más auténtico y atractivo.

El sentido de construir los monasterios en tal ubicación se debía a motivos de protección; además de ser un lugar ideal donde los monjes podían meditar con toda tranquilidad. En total llegaron a ser 24 monasterios, aunque muchos de ellos se destruyeron durante la Segunda Guerra Mundial. De modo que en la actualidad tan solo quedan 13, de los cuales únicamente seis se pueden visitar. Los más destacados son el monasterio de Gran Meteoro y el monasterio Varlaam, ya que dentro pueden observarse antiguos frescos así como unas extraordinarias vistas de todo el valle.

Meteora, en Grecia

Si vas a visitar Meteora, recomendamos alojarse en los pueblos de Kastraki y Kalambaka, puesto que están ubicados cerca de los monasterios. Aunque no sea un destino muy nombrado, en temporada alta encontrarás bastantes turistas, de modo que lo mejor es organizarlo con anterioridad. 

Santorini

Santorini, ese lugar que a todo el mundo le suena pero parece difícil de identificar, es una de las islas más cotizadas de Grecia. Si la comparamos con Mikonos no tiene nada de envidiar en cuanto a belleza y esplendor, aunque si bien es cierto que es menos nombrada turísticamente. Santorini está situada en el archipiélago de las Cícladas, una zona que conserva una belleza natural difícil de encontrar en Europa.

Esta isla es resultado de una erupción volcánica, de ahí parte de su encanto. Su forma es de media luna, y a su alrededor destacan unas cuantas islas que le acompañan aportándole unas bonitas vistas al mar. Lo que encontramos en su interior es una configuración geológica muy atractiva, compuesta de preciosos pueblos de fachadas blancas con ventanas y puertas de azul intenso asomadas a acantilados.

Santorini, en Grecia

Las actividades a realizar en este lugar con casi infinitas. Podemos comenzar por descubrir algunas de sus playas, ver la puesta de sol desde un mirador, realizar una ruta de senderismo, visitar yacimientos arqueológicos como Akrotiri, pasear por las calles de Oía y, como no, disfrutar del ambiente festivo y animado que recorre todos los rincones de esta isla.

Delfos

Delfos es uno de los lugares más místicos de toda Grecia. Se trata de un antiguo templo que ha sido dedicado al Dios Apolo, además de haber sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. No es necesario decir que visitar este lugar es más que obligatorio.

Históricamente su importancia es notable, ya que en la antigüedad en este lugar se encontraba el oráculo de Delfos, donde pitonisas o espiritualistas interpretaban las palabras de los dioses en base a la preguntas y dudas de los peregrinos que acudían en su ayuda. No es de extrañar que Delfos se convirtiera en el centro religioso de Grecia.

Sitio arqueológico de Delfos, en Grecia

Hay varias visitas que vale la pena realizar como distintas ruinas arqueológicas, el templo de Apolo, el teatro antiguo mejor conservado de Grecia, el estadio y el museo donde descansa la figura de bronce del Auriga de Delfos.

Cabo Sunión

El Cabo Sunión es uno de esos lugares recomendados por las personas locales. No es muy conocido turísticamente, y de ahí que conserve aún más todo su encanto. Siéntate mirando al mar Egeo mientras ves una de las más bonitas puesta de sol que se puedan encontrar en todo el mundo.  

Atardecer en Cabo Sunion, en Grecia

Históricamente también tiene mucho que decirnos. En este cabo se levantaron templos en la Antigua Grecia que resuenan en nuestros oídos por no ser la primera vez que los hemos escuchado: el Templo de Atenea y el Templo de Poseidón. Las ruinas de este último del siglo V antes de Cristo, están situadas a 60 metros sobre el nivel del mar. Lo más destacable de este templo son sus largas columnas de seis metros de altura, donde se encuentra el nombre del poeta Lord Byron, escrito por él mismo. El Templo de Atenea está a apenas 5 minutos caminando desde el de poseidón. En este caso no se conservan tantos restos como en el anterior, pero vale la pena hacer una visita.

Olimpia

Olimpia está situada en la Península del Peloponeso. Se trata de un lugar bastante popular en Grecia principalmente porque fue donde se celebraron los primeros Juegos Olímpicos de la historia en el año 776 a.C. Este acontecimiento hace de Olimpia una ciudad turística clave.

Olimpia, en Grecia

Uno de los lugares principales es el Santuario de Olimpia, donde anualmente se celebra la famosa ceremonia de la llama olímpica. Aunque es difícil de imaginar cómo era este evento en la Antigua Grecia, lejos de representarlo con exactitud, es un acto conmemorativo de gran encanto. Como no, encontramos templos dedicados a los dioses como el Templo de Zeus, el estudio de Fidias y el auténtico estadio donde se celebraron los juegos hace casi 3000 años. Otra visita interesante es el Museo Arqueológico de Olimpia, uno de los centros culturales mejor valorados de Grecia.

Creta

Creta es la isla más grande de todo el archipiélago que conforma Grecia. Eso sí, no pienses que es como cualquiera de las ciudades que proponemos anteriormente, pues para conocer bien esta isla hace falta al menos 5 o 6 días. Se trata de un lugar ideal para pasar unos días de ensueño con la mayoría de características propias de la cultura griega. El ambiente en esta isla es desenfadado, amistoso y abierto; las playas son de aguas cristalinas y los pueblos parecen anclados en el tiempo. Como no puede ser menos, también se pueden encontrar ruinas arqueológicas de gran interés. Pero esto no es todo, porque además te encontrarás en un espacio natural y salvaje donde conectar con la naturaleza al mismo tiempo que deleitas deliciosos manjares de la zonaCreta, isla de Grecia

Su capital es Heraklion, una visita agradable y sencilla. Recomendamos una serie de lugares que no te puedes perder: las ciudades de Agios Nikolaos y La Canea, la playa de Elafonisi, el monasterio Moni Arkadiou, la Garganta de Samaria, la ciudad fortificada de Rethymno, la cueva Sendóni, el yacimiento de Gortina, el pueblo pesquero de Loutró, el palacio de Knossos y un par de iglesias como la Iglesia de Agios Georgios o la de Kritsa.

Micenas

Tras la cultura cretense floreció la conocida como cultura micénica, la cual se desarrolló entre los años 1.600 y 1000 a.C. Como su propio nombre indica, una de las ciudades más importantes de esta floreciente cultura fue Micenas, ubicada en el noreste del Peloponeso. El yacimiento arqueológico de Micenas ha sido declarado, junto con el de Tirinto, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Hoy en día conservamos varios restos de aquella imponente ciudad, de los cuales destaca la Puerta de los Leones, una colosal puerta de entrada de la ciudad en cuyo frontón se alzan los relieves de dos leones de casi 3 metros.

Puerta de los Leones, en el yacimiento arqueológico de Micenas

Otro de los lugares que no puedes perderte es la conocida como Tumba de Agamenón. Aunque parece prácticamente descartado que esta construcción albergara los restos del héroe homérico fue denominada así por su descubridor, el arqueólogo Schliemann (el mismo que descubrió los restos de Troya). Lo más interesante de esta tumba, construida entre 1.350-1250 a.C, es su espectacular espacio interior excavado en una elevación de tierra y por la que se accede a través de un corredor descubierto al que flanquean dos imponentes muros de piedra. Y es que este espacio está cubierto por una bóveda de nada más y nada menos que 13 metros de altura. Si eres un apasionado de la cultura griega y de la arqueología, no puedes perderte este lugar.

Monte Athos

Pero no todo en Grecia es su herencia antigua y politeísta. El país mediterráneo también ha sido un importante foco del cristianismo ortodoxo, el cual ha dado lugar a hermosos monumentos. Un puñado de ellos se encuentra en el Monte Athos, en una pequeña península al norte del país. Es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, y con razón: en su suelo se asientan hasta 20 monasterios ortodoxos de gran belleza en un entorno natural de excepción. Eso sí, has de saber que la situación política de este lugar es bastante particular. De hecho, este tema merece un análisis detallado, como te mostrábamos en nuestro artículo sobre cómo acceder al Monte Athos.

Monte Athos, en Grecia

Para empezar, aunque bajo soberanía griega, es un Estado Monástico Autónomo, por lo que se necesitan permisos para acceder. Estos permisos se otorgan según reglas que, hoy en día, nos pueden causar sorpresa: por ejemplo, tienen prioridad de acceso los ortodoxos. Existen permisos también para no ortodoxos, pero la cuota diaria reservado a ellos es mucho menor. Además, sólo pueden acceder varones. Son, en definitiva, reglas que ponen de manifiesto que en el Monte Athos el tiempo pasa más despacio. De hecho, hasta 2005 los catalanes no podían acceder, un veto que responde a un hecho histórica: la devastación producida por los almogávares en el siglo XIV, conocida como la “venganza catalana”. Sin duda que el Estado Monástico Autónomo del Monte Athos es de lo más particular.

Citera

Si eres un amante del Mediterráneo y un apasionado de la mitología griega, la isla de Citera es tu match perfecto. Especialmente porque fue el lugar mítico donde nació Afrodita. El sobrenombre que en ocasiones se le da a la diosa del amor, Citerea, da cuenta de su nacimiento en esta bella isla. Lo primero que hemos de destacar, como no puede ser de otra manera, son sus hermosas playas. Las más conocidas son las de Lagada y Platia Amnios, emplazamientos que son Mediterráneo puro. Tampoco puedes perderte su entorno natural, bien representado por Mipotalamos, un lugar en donde podrás explorar un castillo medieval, la cueva de Hitra y la cascada de Fonisa. Y, para un poco de turisteo urbano, nada mejor que la localidad de Diakofti y su hermoso puerto. No cabe duda que cuando conozcas más a fondo la isla comprendas mejor por qué fue el lugar donde la imaginación mítica de los griegos decidió ubicar el nacimiento de la diosa del amor.

Isla de Citera, en Grecia

 

 

IMG: iStock

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